La Comunidad de Madrid redobla su apuesta por la política liberal en materia de comercio. En un borrador, al que ha tenido acceso EXPANSIÓN, el Gobierno regional estudia aprobar en breve la Ley de Modernización del sector, que supondrá una drástica reducción de la regulación del sector.
Entre otras medidas, la nueva regulación supondría la eliminación de las actuales limitaciones máximas de horarios de apertura semanales (90 horas), diarias (cierre obligatorio entre las 12 de la noche y las 7 de la mañana) y en festivos (12 horas de apertura como máximo). Además, estudiará modificar las actuales limitaciones a la apertura de nuevos hipermercados y las trabas a las ampliaciones y cambio de titularidad.
Esta reforma pretende facilitar las compras de los consumidores en un momento de desaceleración del consumo de los hogares y, del mismo modo, facilitar la competitividad del sector y la creación de empleo.
La Comunidad de Madrid amplía así la brecha abierta con el resto de regiones con su política liberal, ya que, en contraposición a la apuesta del Gobierno de Esperanza Aguirre, la mayoría de las comunidades autónomas ha reducido al mínimo legal las horas de apertura semanal (hasta 72) con la excusa de proteger al pequeño comercio.
Hoy mismo, la Comisión Europea ha decidido denunciar a España ante el Tribunal Europeo de Justicia por las restricciones comerciales. Más en concreto, Bruselas denuncia la trabas puestas a los hipermercados en la regulación catalana.
PYMES
[...]Las pequeñas y medianas empresas deben iniciar un profundo proceso de reconversión tras la evidencia de su incapacidad para competir con las grandes industrias y empresas de distribución. El futuro pasa por la especialización, la producción de calidad, la artesanía, el comercio y los talleres tradicionales y los servicios pegados al terreno. Tampoco puede olvidarse la problemática del trabajador autónomo, que por su falta de cohesión y déficit organizativo, sufre el agravio comparativo con otros sectores laborales de la producción. El MSR plantea una serie de iniciativas para proteger a estos sectores productivos:
Limitar la instalación de nuevas grandes superficies cuya proliferación ha supuesto un enorme impacto para el empleo y para la supervivencia del pequeño comercio, incentiva el consumismo compulsivo y de baja calidad, y deteriora el equilibrio urbanístico de nuestras ciudades y de nuestro modo de vida.
Apoyar al pequeño comercio para que pueda hacer frente a la situación creada de competencia desigual, apostando por la eficiencia y la especialización que debe acometer el sector, fomentando el asociacionismo y las uniones de detallistas. [...] Continúa en http://www.msres.org/programamsr.html
