Alrededor de un centenar de jóvenes
nacional revolucionarios ayer, 24 de Octubre salieron a las calles de
Madrid para reivindicar una educación pública y de calidad, tratando de
sumarse a la manifestación teóricamente abierta a “todo el mundo” que
convocó la plataforma por la defensa de la educación, y a la que se
sumaron una multitud de asociaciones y sindicatos como convocantes. Liga
Joven, siendo una asociación juvenil mayoritariamente de estudiantes,
preocupada por el futuro de los jóvenes españoles, apostó por sumarse a
la protesta con decisión, ya que el carácter de una convocatoria abierta
a todo el público permite unirse a cualquier persona acorde con el
lema, para que su voz se escuche proclamando derechos fundamentales y
suene más fuerte. Sin embargo, rompiendo con la coherencia, una vez más
no son bien recibidos, ya que la “tolerancia relativa” dice “sí,
tolerancia democrática pero no para todos”, causa por la que de nuevo,
las banderas de España no son bien recibidas. Por tanto, ¿es acaso un
arma peligrosa mostrar una bandera nacional? ¿Es inconstitucional o anti
constitucional una rojigualda lisa? ¿Acaso no lo es la tricolor que
hondea a sus anchas en unas politizadas manifestaciones supuestamente
abiertas a todo el público? Las incoherencias caen por su propio peso, y
a buen entendedor pocas palabras bastan.
Al llegar al Ministerio de Educación,
cantando consignas como “Universidad pública”, “Liga Joven” o “Vuestra
Crisis no la pagamos” haciéndose paso pacíficamente entre un grupo de
antifascistas que, probablemente esperaban al no tan pacifista grupo
“Bloque Antifascista Juvenil”, fueron detectados por la policía que
rápidamente, en nombre del orden y la libertad, comenzaron a cargar
contra el centenar de jóvenes. Sin embargo, y para su sorpresa, éstos
decidieron resistir y aguantar el amedrentamiento de los agentes para
que pacíficamente se siguiera escuchando su lema bajo símbolos que,
según algunos medios de “desinformación” eran de carácter “ultra”, el
trébol de cuatro hojas y la bandera de España.
Inmediatamente después, comenzó una
segunda carga, la más violenta, en la que como resultado se vieron en el
suelo varios jóvenes con fuertes golpes por las porras de los agentes, y
detenido el camarada L.B., ya puesto en libertad, quien recibió una
fuerte paliza por la que tiene varias heridas y la agresión no paró
incluso una vez reducido.
Finalmente, fueron escoltados por la
policía y filiados, aunque su represión no acalló a estos idealistas que
siguieron gritando por la educación pública.
Gracias a actuaciones desmesuradas,
injustas y anticonstitucionales como las que sucedieron ayer, por fin se
desenmascara al servicio de quién está la Policía Nacional de éste
país. Gracias al valor de éstos jóvenes de Liga Joven y simpatizantes,
se ve a quién se le permite luchar por sus derechos y a quién no.
Gracias al sistema y a sus lacayos se ha quitado la careta a todo este
circo y hemos podido ver sus caras. Un sistema capitalista que impone un
gobierno liberal que se ve beneficiado por la monopolización de los
derechos sociales por una izquierda inepta, intolerante e ineficaz que
repele con la ayuda de las Fuerzas del Orden a una verdadera lucha
social y nacional, una tercera vía que un puñado de jóvenes han gritado
para ser, quizás, algún día escuchados y para, por qué no, asaltar el
futuro.
Militante de Liga Joven Madrid