Un
gran número de manifestantes se citaron en la boca del metro Metropolitano, para
llegar en grupo al lugar donde daba comienzo la marcha.
Una
vez llegados a la boca de metro de Ciudad Universitaria y mientras se
esperaba
el comienzo del acto, nos encontramos a un patético grupo de unos 50
antifascistas que pretendían boicotear la manifestación parapetados
dentro de una facultad a doscientos metros del inicio de la
manifestación,dejando claro una vez más que son una buena banda de
cobardes y que la presencia policial les vino de lujo.
La
manifestación comenzó sin más incidentes, con cánticos por la educación pública
y de calidad, y contra el pretendido monopolio ultraizquierdista de las aulas,
y se desarrolló sin problemas hasta llegar a su destino, la Facultad de
Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid, destacando el
encendido de varias bengalas en las escaleras que unen ésta con las Facultades
de Derecho y Filosofía.
Al
llegar a la Facultad de Historia, fortín antifascista y gran foco de
adoctrinamiento izquierdista de los alumnos, se guardó un minuto de silencio en
recuerdo por nuestros camaradas griegos de Amanecer Dorado, asesinados
cobardemente hacía poco más de dos semanas. Posteriormente, se realizaron discursos, hablando de la
politización que padecen nuestras universidades, destacando las bonanzas de los
sistemas educativos de los fascismos europeos del siglo XX, y resaltando la
importancia de nuestra lucha y su necesidad de cara al presente y al futuro de
nuestra Patria y de sus hijos.
Fue
la primera manifestación nacionalista en la universidad desde hace una década, y podemos
asegurar que no será la última, porque hemos venido para quedarnos y no vamos a
permitir que nada ni nadie nos pare.