Ayer, 2 de Abril, alrededor de las ocho de la tarde, una
docena de militantes de Liga Joven acudió a la charla en un centro de la UCM convocada
por la asociación CeAqua, donde fueron invitadas diversas asociaciones de la
extrema izquierda, Sindicato de Estudiantes, Contrapoder y la Caverna, para
tratar el tema de la represión estudiantil. Liga Joven decide asistir a dicha
charla de forma pacífica para exigir una explicación por el reiterado veto que
dicha asociación sufre por parte de organizaciones públicas y “no políticas”
como la Marea Verde y sus diversos componentes. Es en el marco del diálogo en
el que se comienza la intervención de Liga Joven, espetando que no es
comprensible que dichos conferenciantes hablen en boca de sus asociaciones
sobre la represión, cuando ellos mismos son los que reprimen cualquier apoyo o
protesta bajo la bandera nacional, que cómo es posible que hablen de represión
cuando ellos son los que expulsan de manifestaciones públicas en defensa de los
derechos sociales a aquél que políticamente no comparte una ideología de corte
izquierdista o republicano históricamente hablando.
La demonización hacia la rojigualda por parte de los sindicatos
subvencionados y nostálgicos de la mal llamada “Memoria histórica”, queda
absolutamente demostrada en el momento en el que una de las militantes alza una
bandera de España y dice que “esto no es provocación; esto es ser español”,
para desmentir la vinculación entre sentirse español y ser un reaccionario, que
el ser de clase obrera y español en la lucha por los derechos sociales no es
únicamente legítimo, sino además símbolo de coherencia. En el momento en el que
se enseña la bandera nacional, efectivamente, el espíritu de la violencia
extrema e irracional posee al casi centenar de asistentes, que como endemoniados
rociados por agua bendita comienzan a proferir gritos tan democráticos y
tolerantes como “¡Matadlos! ¡Que son fascistas!”, volviendo como infantes a
añejos recuerdos de trincheras y fusiles, haciendo, una vez más, alarde de su
profunda ignorancia. Cuando los abucheos, insultos y amenazas se hacen
ensordecedores, deciden intentar expulsarles de una de los dos únicas formas
con las que saben actuar, con la fuerza (la otra es el victimismo y el llanto
amparados por los medios de masas). A pesar de ser casi un centenar y los
militantes de Liga Joven una docena, se hizo frente con valentía y no se dejó
que ultrajaran la bandera de España, que intentaron arrebatarles por todos los
medios. Se aguantó el ataque violento hasta el mismo momento de abandonar las
instalaciones de la Escuela de Relaciones Laborales de la UCM donde se realizan
unas “jornadas por las víctimas del franquismo” en donde se enmarcó dicha
charla estudiantil. Tres miembros fueron retenidos y filiados por la policía.
Efectivamente, actuaron de la misma forma que se les reprochó de forma dialogada: reprimiendo cualquier palabra, cualquier propuesta que sea trasversal o no figure en la “biblia” de la políticamente correcto, en esta España fracturada y nostálgica de la barbarie marxista. Por ello, todos los asistentes escucharon la objeción atentamente, tolerancia que explotó por los aires en el momento en el que la rojigualda inundó sus retinas; es el turno en el que las palabras son acalladas y la sinrazón brota de sus rabiosos corazones. Pero quedaron muchas preguntas que formular, ¿por qué protestar contra la Ley Mordaza si vosotros sois los primeros en oprimir la libertad ideológica?, ¿qué interés tenéis, vosotros, los subvencionados del sistema, los que chupáis del bote de todos, en que la izquierda monopolice toda la lucha social y aplaste ferozmente con demagogia cualquier alternativa patriota y social?, ¿por qué envenenáis al pueblo con vuestro mensaje apátrido demonizando todo sentimiento de sentirse en casa? ¿Por qué habláis de tolerancia cuando imponéis vuestra dictadura ideológica donde “o con nosotros o contra nosotros”? La lucha por los derechos sociales no es posesión ni de izquierdas ni de derechas ni de subvencionados, LA LUCHA LE PERTENECE A QUIEN ESTÁ DISPUESTO A DARLO TODO POR ELLA.
