De nuevo la izquierda mediática promueve el boicot y el apartheid político contra nuestros derechos. Presionando al embajador palestino en España a condenar la intervención del libanés Adnan Ezzedine y de la organización 'Icai Hokok' en sus conferencias sobre Palestina.
Cuando un patriota milita en actividades ecologistas o en contra del maltrato animal, según esta izquierda, lo hace por "oportunismo y electoralismo", mientras sólo ellos pueden monopolizar y sectarizar las causas nobles.
La embajada Palestina es consciente del gran lobby mediático con el que cuenta la prensa de izquierda en España, por lo que prefiere ceder a los deseos del antifascismo profesional que de sumar apoyos para una causa tan justa como la Palestina. Nosotros lo tenemos claro, seguiremos luchando por las causas que consideramos nobles, les guste o no a la izquierda más rancia, más preocupada en mantener su hegemonía política que de denunciar la opresión y tiranía del sionismo en el mundo. Y es que conviene recordar lo que nos diferencia a ellos con nosotros sobre Israel, en el que no dudan en Alemania, EE.UU. o Inglaterra en marchar junto a banderas israelíes. Su antisionismo solo es visible cuando se habla del estado terrorista de Israel, pero cuando se denuncia las políticas sionistas en otras partes del mundo, entonces curiosamente suelen ver fascistas y antisemitismo por todos los lados. Este doble juego de la izquierda con el sionismo no es casual, su antisionismo es oportunista y tenemos numerosos ejemplos al respecto.
Como critica en su blog el escritor y activista antifascista David Karvala, donde denuncia que hablar sobre las oligarquías y plutocracias sionistas es cosa de "nazis y racistas", como si el problema de Israel estuviera limitado a los abusos de un grupo de militares israelíes sin escrúpulos.
Las juventudes del Likud no dudan en perseguir y difamar en Francia contra personas como el cómico Dieudonné o el filósofo Soral, por sus valientes posturas frente al sionismo. Contando el Likud con la impunidad del gobierno para usar su violencia gratuita y boicot contra sus carreras profesionales. Algo que aquí ya realizan los colectivos antifas, más preocupados en servir a sus intereses partidistas que en combatir a estas organizaciones que cuentan con tanta influencia en todo el mundo. Es por ello que la causa palestina, es una causa que nos afecta a nuestras vidas.
Quien dude de la responsabilidad de los servicios secretos de Israel en fomentar a grupos terroristas yihadistas en España y Europa, o es un necio o un ignorante.
Desde el MSR mostramos toda nuestra solidaridad con todos los valientes que optan por denunciar a estos colectivos, como anunciamos nuestra decisión de seguir luchando por lo que creemos justo, aunque moleste a la casta y su policía del pensamiento.
