Definitivamente
y debido a las condiciones meteorológicas nos vimos obligados a suspender la
ascensión a Cabeza de Hierro Mayor por Cuerda larga. Aún así un pequeño
grupo estábamos decididos a subir a la
sierra y por lo menos valorar las posibilidades
de realizar alguna otra ruta. Por
el camino decidimos ir hasta Cotos y ver como estaba la zona del Peñalara.
Al llegar al puerto de Navacerrada nos encontramos con una ventisca de nieve que obligó a la mayoría de los vehículos a darse la vuelta, nosotros decidimos colocar las cadenas y seguir adelante. Finalmente conseguimos llegar a la zona de Cotos. Allí estaba nevando ligeramente y había viento flojo con alguna racha más fuerte, a nuestra altura no se apreciaba niebla, sin embargo el pico de Peñalara no era visible, así que decidimos emprender la marcha hacia la zona de laguna Grande y desde allí ya valorar si intentábamos hacer cumbre. A medio camino, justo antes de internarnos en el bosquecillo ya nos encontramos con gente volviendo de aquella zona y nos comentan que la subida está muy mala y que ellos se han dado la vuelta, aún así decidimos ir y valorar por nosotros mismos. Nos internamos en el bosquecillo y vivimos uno de los momentos más idílicos de la marcha, la situación y el propio bosque nos protege del viento, la ligera nevada y los pajarillos de la mañana cantando, instintivamente ellos iban a protegerse del viento también a ese bosque, nos hacen vivir un momento inolvidable.
El camino sale del bosque y tuerce
dirección norte, hacia la laguna, lo seguimos y al poco vemos una fila de
excursionistas con raquetas de nieve, están parados en el camino colocándose
equipo. Cuando llegamos a su altura lo comprendemos, un viento helado nos
golpea en la cara y nos enfría los miembros ¡pero empezad ya a andar que nos
estamos helando aquí parados! Comienzan a andar de nuevo, el viento es cada vez
más fuerte, trae consigo afilados trozos de hielo que se clavan en la cara y
duelen. Nos paramos ahora nosotros y nos colocamos las gafas y nos protegemos
la cara como podemos. De esta forma continuamos hasta la laguna, cuando
llegamos nos encontramos una bonita planicie de nieve y hielo.
Pero definitivamente el tiempo está muy
malo y decidimos no continuar hacia arriba, así que marchamos otra vez por
donde hemos venido. De nuevo llegamos al bosquecillo donde todo se calma otra
vez y para concluir y después de soportar la fría ventisca nos tomamos algo
caliente en la fonda de por allí que todo el mundo que ha ido conoce y que como
es natural ese día estaba hasta los topes.
A pesar del mal tiempo y de lo corto del recorrido fue una buena
experiencia y lo pasamos muy bien. Para quien quiera conocer y saber moverse
por la montaña no es bueno ir únicamente los días en los que luce un sol esplendido,
hay que conocer y experimentar también la fuerza que el mal tiempo y la
ventisca pueden llegar a tener (aunque ese día solo se de un paseo por la
montaña sin mucho riesgo), para llegado el caso saber a que nos enfrentamos y
para no caer en el gran error más común en montaña, el de infravalorar sus
peligros. Personalmente creo que este día nos ayudó a comprender un poco mejor
el reciente fallecimiento de un montañero que apenas unas semanas antes ocurrió
en esta montaña.
Por último agradecer a los camaradas y amigos que vinisteis, sin los que esta actividad que realiza Hispania Verde no tendría sentido.
Esperando veros en la próxima actividad, Saludos a todos !!
Delegación Centro de Hispania Verde
Por último agradecer a los camaradas y amigos que vinisteis, sin los que esta actividad que realiza Hispania Verde no tendría sentido.
Esperando veros en la próxima actividad, Saludos a todos !!
Delegación Centro de Hispania Verde